En España no hay trabajo cualificado
En los últimos meses se ha hablado mucho del fracaso escolar y la baja calidad de la formación en España, considerándose que éste es uno de los factores que engordan la tasa de paro.
Aunque sí que es cierto que el paro afecta principalmente a las personas con estudios primarios o secundarios, si dividimos por grupos de edad comprobamos que disponer de estudios superiores es sólo una mínima garantía para los trabajadores con más de 30 años.
La tasa de paro de los jóvenes con titulaciones superiores, es de un 29,92% para los que tienen menos de 25 años y un 16,36% para los de entre 25 y 29. (Tercer Trimestre de 2009. Fuente INE)
Sin duda, la crisis afecta más a los jóvenes con menor nivel de formación. La tasa de paro para el rango de edad de 25 a 29 años con sólo educación primaria es escalofriante y ha crecido desde el 11,92€ del 2006, hasta el 38,08% en el 2009.
Otro dato curioso es que la tasa de paro es inferior en las mujeres para estos tramos de edad. Dato que, aunque hay que tomarlo con cautela, puede deberse a que las mujeres trabajan en peores condiciones y con salarios más bajos. Que el salario medio de las chias de entre 25 y 29 años en el 2007 fuese de 14.714€ anuales, puede ser un indicador de la baja calidad del trabajo.
Por mucho que los medios se pasen horas y horas demonizando a la juventud del botellón y nos culpabilice de nuestra situación poniéndoles nombres generacionales (como NI-NI), lo cierto es que el mayor motivador para el esfuerzo es comprobar que existe una recompensa. La realidad muestra que la crisis está afectando a los jóvenes mucho más que esas generaciones que son, en realidad, los culpables de la especulación y la irracionalidad explotadora.
En España no hay trabajo cualificado, y cabe pensar que, desde la caída de la construcción, los universitarios son los que están ocupando el trabajo descualificado y de baja calidad. Mientras no se produzca empleo de calidad es complicado explicarle a un niño de 17 años que seguir estudiando es una garantía.
Esta situación me recuerda a aquella canción de Siniestro Total que decía: