Un poco mas

Continuamos con los resumenes retardados de nuestras andanzas, se ve que me mola esto de hacer memoria con un mes de retraso

Pues despues de pasar el fin de año en Koh Chang nos fuimos de nuevo hasta Bangkok para recibir a Tere en su tan esperada visita, por lo menos por mi parte. Despues de estar un par de días en Bangkok para que se acostumbrara un poco, tomamos rumbo hacia Koh Panghan, la isla de la archifamosa Full Moon Party y donde de nuevo nos ibamos a ver las caras con nuestros queridos amigos argentinos. El problema fue que nos vinimos arriba el dia anterior a la fiesta (yo y mi chica los que mas) y ninguno de los 2 pudo disfrutar de la fiesta el día grande, pero hay que decir que lo pasamos como enanos ese dia

Alli estuvimos un par de días más curandonos las heridas de guerra, hasta que emprendimos viaje hacia la costa de Andamán, donde pudimos disfrutrar de unas playas e islas increibles, a la par que bastante petadas de guiris. Estuvimos en Ton Say, Railey, Koh Phi Phi y unos en Koh Lanta y otros en Ao Nang. Todos sitios muy guapos, si bien Phi Phi es un tanto caro y bastante turistico. La división vino producida por una gran cagada por mi parte que finalmente quedo en un susto. Esto es, me olvidé mi cartera con mi pasaporte, tarjetas y 300$ en Ton Sai, un lugar solo accesible por barco y afortundamente bastante cerca de Phi Phi. La suere quiso que la gente de los bungalows donde estábamos fuese honrada y me guardasen la cartera con todo

A partir de ahi, vuelta en avión desde Krabi a Bangkok, para coger un bus hast Camboya, primera parada Siem Reap, no sin tener que pagarle un "extra" al señor policía de la frontera. En Siem Reap pudimos disfrutar de los majestuosos templos de Angkor, lugar que curiosamente no está considerado un de las 7 maravillas del mundo, cuando el cristo de corcovado si lo es....
Después, hacia Battambang, donde pudimos ir en un tren de bambú e ir a ver la salida  cenar de unos cuantos miles (billones dijo alguno) de murciélagos

Para continuar en Camboya, nos fuimos hasta su capital Phnom Penh, donde pudimos observar las atrocidades de los Jemeres Rojos en uno de sus capos de exterminio y en una escuel que usaban como centro de tortura. Por si no lo sabéis, esta gente se cargó a 3 millones de personas en sólo 3 años

Aqui abandonamos la grata compañía de mi señora para continuar hacia la costa camboyana, concretamente en Sihanoukville, un sitio muy barato para comer y beber, pero que sinceramente no me cautivó

Y despues de Camboya, Vietnam, país en el que nos encontramos todavía, y del que daré buena cuenta en próximos episodios

Besos  tod@s y a ver si contáis algo, coñe!