lunes, noviembre 24, 2008

LOS AMOS DEL MUNDO Arturo Pérez-Reverte

Me llega este artículo por mail, que parece ser que escribió Pérez-Reverte hace 10 años, y como todavía no habíamos hablado de crisis por estos lares, pues me pareción interesante. Será este hombre el próximo Nostradamus??? Como se entere Paco Rabanne le hace un mausoleo:

(Artículo del escritor español Arturo Pérez-Reverte, publicado en 'El Semanal' el 15 de noviembre de 1998, y que ahora, diez años después....)

Usted no lo sabe, pero depende de ellos. Usted no los conoce ni se los cruzará en su vida, pero esos hijos de la gran puta tienen en las manos, en la agenda electrónica, en la tecla antro del computador, su futuro y el de sus hijos.
Usted no sabe qué cara tienen, pero son ellos quienes lo van a mandar al paro en nombre de un tres punto siete, o un índice de probabilidad del cero coma cero cuatro.
Usted no tiene nada que ver con esos fulanos porque es empleado de una ferretería o cajera de Pryca, y ellos estudiaron en Harvard e hicieron un máster en Tokio, o al revés, van por las mañanas a la Bolsa de Madrid o a la de Wall Street , y dicen en inglés cosas como long-term capital management, y hablan de fondos de alto riesgo, de acuerdos multilaterales de inversión y de neoliberalismo económico salvaje, como quien comenta el partido del domingo.
Usted no los conoce ni en pintura, pero esos conductores suicidas que circulan a doscientos por hora en un furgón cargado de dinero van a atropellarlo el día menos pensado, y ni siquiera le quedará el consuelo de ir en la silla de ruedas con una recortada a volarles los huevos, porque no tienen rostro público, pese a ser reputados analistas, tiburones de las finanzas, prestigiosos expertos en el dinero de otros. Tan expertos que siempre terminan por hacerlo suyo. Porque siempre ganan ellos, cuando ganan; y nunca pierden ellos, cuando pierden.
No crean riqueza, sino que especulan. Lanzan al mundo combinaciones fastuosas de economía financiera que nada tienen que ver con la economía productiva. Alzan castillos de naipes y los garantizan con espejismos y con humo, y los poderosos de la Tierra pierden el culo por darles coba y subirse al carro.
Esto no puede fallar, dicen. Aquí nadie va a perder. El riesgo es mínimo. Los avalan premios Nóbel de Economía, periodistas financieros de prestigio, grupos internacionales con siglas de reconocida solvencia.
Y entonces el presidente del banco transeuropeo tal, y el presidente de la unión de bancos helvéticos, y el capitoste del banco latinoamericano, y el consorcio euroasiático, y la madre que los parió a todos, se embarcan con alegría en la aventura, meten viruta por un tubo, y luego se sientan a esperar ese pelotazo que los va a forrar aún más a todos ellos y a sus representados.
Y en cuanto sale bien la primera operación ya están arriesgando más en la segunda, que el chollo es el chollo, e intereses de un tropecientos por ciento no se encuentran todos los días. Y aunque ese espejismo especulador nada tiene que ver con la economía real, con la vida de cada día de la gente en la calle, todo es euforia, y palmaditas en la espalda, y hasta entidades bancarias oficiales comprometen sus reservas de divisas. Y esto, señores, es Jauja.
Y de pronto resulta que no. De pronto resulta que el invento tenía sus fallos, y que lo de alto riesgo no era una frase sino exactamente eso: alto riesgo de verdad.
Y entonces todo el tinglado se va a tomar por el saco. Y esos fondos especiales, peligrosos, que cada vez tienen más peso en la economía mundial, muestran su lado negro. Y entonces, ¡oh, prodigio!, mientras que los beneficios eran para los tiburones que controlaban el cotarro y para los que especulaban con dinero de otros, resulta que las pérdidas, no.
Las pérdidas, el mordisco financiero, el pago de los errores de esos pijolandios que juegan con la economía internacional como si jugaran al Monopoly, recaen directamente sobre las espaldas de todos nosotros.
Entonces resulta que mientras el beneficio era privado, los errores son colectivos, y las pérdidas hay que socializarlas, acudiendo con medidas de emergencia y con fondos de salvación para evitar efectos dominó y chichis de la Bernarda.. Y esa solidaridad, imprescindible para salvar la estabilidad mundial, la paga con su pellejo, con sus ahorros, y a veces con su puesto de trabajo, Mariano Pérez Sánchez, de profesión empleado de comercio, y los millones de infelices Marianos que a lo largo y ancho del mundo se levantan cada día a las seis de la mañana para ganarse la vida.
Eso es lo que viene, me temo. Nadie perdonará un duro de la deuda externa de países pobres, pero nunca faltarán fondos para tapar agujeros de especuladores y canallas que juegan a la ruleta rusa en cabeza ajena.
Así que podemos ir amarrándonos los machos. Ése es el panorama que los amos de la economía mundial nos deparan, con el cuento de tanto neoliberalismo económico y tanta mierda, de tanta especulación y de tanta poca vergüenza.

4 comentarios:

J. ARCE dijo...

Lo que ha llegado se esperaba hace años pero no en el '88. Lo curioso es que la economía española aguantó estos últimos cuatro años y espero a hundirse a que se hundiese la mundial. De esto se habló en la crisis del '94 y ¿qué tenemos? ¿Qué se hizo? Nada. Este puto pais tercermundista siguió basándose en la construcción sin invertir en I+D+I. En Alemania se está hablando de cómo salir de la crisis y si escuchas los nombres de las compañías que están hablando con el gobierno flipas. Aquí quién se reúne con el gobierno. Empresas extranjeras fabricantes de automóviles porque si esperan a las mejores empresas españolas se tendrán que reunir con El Corte Inglés, Repsol, Sacyr, Telefónica, Zara... Mierda, vamos. Y es injusto echarle toda la culpa al inútil de Bush. Los políticos llevan en manos de las multinacionales desde principìo de siglo.

Lalo dijo...

Bueno

Precisamente no peco de españolista, pero creo que me toca defender un poco a España en este tema. El otro día flipé cuando me enteré que un país sin apenas recursos naturales era la 8ª economía mundial, y no creo que ninguno de los 7 paises que van delante han tenido una dictadura hace 25 años. Las empresas que nombras son de las primeras del mundo en sus sectores (te has olvidado del Santander o del BBVA), lo cual humildemente me parece la ostia. En Alemania el gobierno tuve que ayudar a la banca, cosa que aquí no ha pasado, no es eso más tercermundista?
Así que creo que tan mal no esta la cosa.
Bien es cierto que hay muchisimas lagunas que hay que cubrir (el I++D+I es una vergüenza en este país) y muchisimas cosas que mejorar, pero no creo que la cosa sea tan mala

J. ARCE dijo...

Te recuerdo que Alemania sufrió dos guerras en poco más de 30 años y que cinco años después de la segunda ya estaba a la cabeza de Europa. Lo de la banca española esperamos a discutirlo al próximo año, que la expectativas son bastante malas. Y te recuerdo también que Argentina llegó a ser la quinta potencia del mundo y ahora es el territorio de Perón y Maradona.

Anónimo dijo...

Bueno bueno... cómo están los animos en la familia Arce. jeje!!

Conste que lo de la crisis yo también lo decía hace un par de años, cuando todo el mundo decía que los de las inmobiliarias eran los que se forraban. Ni tanto chollo eran las inmobiliarias, ni tanta crisis es lo de ahora...

Saludos!!

Nhotar