sábado, diciembre 08, 2007

Todo a estribor

Pocas cosas hay tan pasadas de moda como la política tratada en los términos en los que solemos hablar de ella en este blog. Las ideologías que tratan de esbozar sistemas de organización social están completamente fuera de las reflexiones colectivas y, de los postulados teóricos del XIX, sólo se conservan pequeños ecos, derechos fundamentales que, a duras penas, tratamos de no perder del todo.

El poder político ha perdido la mayoría de sus bazas en beneficio del libre mercado y su papel se ciñe a poco más que extender licencias de urbanización, hacer campañas de tráfico y suprimir el humo del tabaco en los lugares públicos. El mercado campa a sus anchas y pocas o ninguna son las reformas que se hacen de un modo estructural, es decir, modificando en realidad las bases sobre las que se rigen los flujos económicos (hacer esto es de "populistas", se dice). A lo máximo que se aspira es a realizar una suerte de distribución de la riqueza mediante pagos a los ciudadanos para que tengan hijos, para que alquilen un piso o para que el Euribor les afecte lo mínimo. Lo que se da por sentado con esta actitud es que el mercado y "la libertad" de especulación son intocables.

Asentados en esta idea poco es lo que distingue a un partido de derechas sobre uno de izquierdas en términos reales y son los aspectos simbólicos los que diferencian en realidad a conservadores de progresistas (matrimonio homosexual, asignatura para la ciudadanía, etc.). El problema de esta apolítica general es que el conservadurismo cada vez gana más adeptos en las clases bajas e incluso dentro de la población inmigrante (muy pragmática) y los intereses económicos de las clases altas (hechos) se combinan con las emociones conservadoras (símbolos) de unas clases bajas que ven en la derecha un flotador que aporta orden y mano dura en un contexto tan revuelto como el que todo los días se encargan de dibujar los telediarios de capital derechón (Antena 3 y Tele 5, básicamente).

De este modo una derecha que por lógica debería estar contra las cuerdas tras lo ocurrido en el 11M sigue manteniendo como cabezas visibles a personajes como Zaplana y Acebes, delincuentes que mienten por defecto y mantienen la contienda política en un juego de matones de barrio. Manejan los símbolos del caos y de la España que se rompe, para en realidad romperla ellos y autocumplir una profecía a base de trampas y mentiras como las que, impunemente, viene vomitando el periódico El Mundo.

Y lo cierto es que la derecha se está encontrando cada vez más cómoda en este escenario del espectáculo continuo. Marcan la agenda política de cada día, hacen slogans verdaderamente deslumbrantes (el "efecto llamada", por ejemplo) y crean una realidad ficcionada que pone el énfasis en aspectos tan simbólicos como intrascendentes para encubrir sus verdaderos intereses (euros + euros).

El gobierno y la izquierda, por su parte, no ha conseguido tejer un discurso tan breve y conciso que en 59 segundos consiga desmontar el lenguaje de la derecha. Zapatero se ha convertido en un saco de golpes y sus votos son los de la antiderecha. El problema es que la estrategia feroz y ruda del PP y la actitud defensiva del PSOE, está haciendo bascular a este Estado hacia la derecha de un modo verdaderamente preocupante. El debate sobre el modelo de estado, por ejemplo, enfrenta a los que dicen que España se rompe con los que dicen que eso no es verdad, sin que tengan cabida posibilidades activas o positivas hacia algún tipo de cambio. El ritmo lo marca el PP y el PSOE se ve limitado a que no suceda lo que el PP dice que puede suceder. Esto no es otra cosa que hacer lo que el PP manda (todas las ruedas de prensa del PP son listados de tareas para el gobierno) y la política del PSOE hace tiempo que es prácticamente nula, a excepción de esos detalles simbólicos que, como demuestran las encuestas, le cuestan más votos de los que gana.

La reacción cabe esperar que venga de una izquierda radical y desvertebrada mucho más hábil en la construcción de teoría facilona que la izquierda moderada pero que a base de actitudes "políticamente incorrectas" sólo consiga, en la práctica, crear una base más sólida a la verborrea pepera. Cuando se presente el mesías Gallardón a presidente del gobierno ya tendremos nuestros "zeros" a tope de vaselina.


P.D.: Siento el ladrillo que os acabo de meter, pero hacía tiempo que no escribía y era esto o hacer la pregunta de por qué a López Caro no lo critica la prensa, por qué nadie dice que Perera es un cáncer y por qué no se reconoce que Lequi y Contreras, lejos de ser unos salvadores, son unos descerebrados (Hristo vuelve!!!)

7 comentarios:

Visi dijo...

De ladrillo nada! É boísimo!! Escribichelo ti? Porque de ser así xa te podes adicar a escribir. Em serio.

nhotex dijo...

Gracias Visi. Claro que lo he escrito yo... ;)

J. ARCE dijo...

"La reacción cabe esperar que venga de una izquierda radical y desvertebrada mucho más hábil en la construcción de teoría facilona que la izquierda moderada pero que a base de actitudes "políticamente incorrectas" sólo consiga, en la práctica, crear una base más sólida a la verborrea pepera. Cuando se presente el mesías Gallardón a presidente del gobierno ya tendremos nuestros "zeros" a tope de vaselina."
De acuerdo hasta esta parte. El hablar de reacción de la izquierda radical supone que esa reacción va a ser canalizada por partidos políticos o por políticos disfrazados de camaradas y eso supondría más de lo mismo, como pasó en Rusia con el comunismo.
Me hace gracia ver cómo aún consideráis desde la izquierda radical al PSOE como un partido hermano. Es como ver al chupapollas de Llamazares hacer gobierno con los socialistas: patético. La verdadera izquierda es la de la guerra civil: comunistas y anarquistas liándose a tiros en Barcelona llevados por el odio mutuo. Y el PSOE de aquélla era un partido minoritario.

Visi dijo...

"La reacción cabe esperar que venga de una izquierda radical y desvertebrada mucho más hábil en la construcción de teoría facilona que la izquierda moderada pero que a base de actitudes "políticamente incorrectas" sólo consiga, en la práctica, crear una base más sólida a la verborrea pepera. Cuando se presente el mesías Gallardón a presidente del gobierno ya tendremos nuestros "zeros" a tope de vaselina"
Ou estou equivocado, ou Nhotes cando dí isto se refire a que a únika reaccion que se contempla é umha esquerda alternativa," politicamente incorrecta" ( xa o pon entre comillas)que cale entre a xuventude. Como dis tí canalizada por partidos políticos.Ou sexa umhas kaka e un enganabobos.
"Me hace gracia ver cómo aún consideráis desde la izquierda radical al PSOE como un partido hermano" ???????????????????
"La verdadera izquierda es la de la guerra civil: comunistas y anarquistas liándose a tiros en Barcelona llevados por el odio mutuo. Y el PSOE de aquélla era un partido minoritario" .
Quen o puxo en dubida? Pero... anarquistas son anarquistas, libertari@s, non de esquerdas ( q sempre implika aceptación do Estado)

Anónimo dijo...

Creo que responde bien Iker. La verdad no me considero parte de la izquierda radical y no considero que esté hermanada con el PSOE.

Quizás los conceptos de izquierdas y derechas ser esté haciendo demasiado difusos...

J. ARCE dijo...

Ahora parece que lo que se lleva es hablar de liberales y radicales. Eso le vendría bien a la derecha ya que los radicales tienen bastante mala fama(no se distingue si son de izquierdas o derechas) y los liberales son de derechas.

nhotex dijo...

Hola cahvales!

Lo primero deciros que escribáis algo que estoy hasta los h de ver el jeto de gallardón en primera plana.

Lo segundo que he puesto publicidad en el blog para ver si da algo de resultado. Aunque si los visitantes pinchan quizás saquemos para una cena ...